¡Hágase el avión! Y éste aparece entre la cámara y la Luna

La operación fue un éxito. El Celestron 8 y el 11 quedaron perfectamente alineados, como se ve en la imagen inferior. No hay nada mejor para llegar a culminar un trabajo con éxito que el empezar a ejecutarlo (aunque la pericia y la paciencia sin duda influyen también mucho).

Empezaron a hacer pruebas y captar imágenes de la Luna. Era aún de día (hacia las 21,00 h). 
Y de golpe ¡Hágase el avión...! y, en medio de una toma de José Miguel Gómez y de Jesús Álvarez de seis milisegundos de nuestro satélite, en la que trataba de captarlo con el máximo detalle, se coló un avión (al que siguieron otros). El 'pasillo' de los aviones hacia el aeropuerto de El Prat pasaba justo entre la Luna y su cámara en esos breves momentos (el movimiento de la Luna pronto la sacó del itinerario). Abajo vemos una imagen del tránsito del avión visto en la pantalla del ordenador.
Sólo 6 milisegundos, y el avión ya no sale casi... El brillo del aeroplano es por el reflejo de las nubes de su alrededor.

Según Nicola Lavarino, Los pasillos de los aviones suelen tener una tolerancia de una milla náutica (una a la izquierda y una a la derecha), pero al ser guiados por GPS (si llevan el piloto automático) suelen pasar exactamente siempre por el mismo sitio. 

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