También la bellísima nebulosa planetaria del Anillo (Messier 57), en la constelación de la Lyra, suele alegrar también cualquier noche de observación de verano, tanto por lo curioso de la vista y del fenómeno astronómico que la ha producido como meditando en al suerte de vivir muy lejos de ella.
Una nebulosa planetaria es un objeto astronómico que se forma cuando una estrella similar al Sol agota su combustible nuclear y comienza a expulsar sus capas exteriores hacia el espacio. Este proceso crea una estructura brillante de gas y polvo; principalmente hidrógeno y helio, en expansión alrededor del cuerpo celeste que se ilumina por la radiación de la estrella central, a la que podemos ver claramente en esta magnífica imagen, pese al pequeño tamaño aparente de la nebulosa, fotografiada con su SkyWatcher Mak 127 (2 horas de RGB) desde Viladecans la noche del sábado 21 de junio por José Luis Martín. La gama de colores en la nebulosa y en las estrellas son realmente un gran logro.
Como se indica en la Wikipedia "está situada a 2300 años luz de la Tierra (la luz que vemos se emitió en el tiempo de Alejandro Magno) y fue descubierta por el astrónomo francés Charles Messier el día 31 de enero del año 1779. Sin embargo, pocos días después del hallazgo de Messier, el astrónomo Antoine Darquier de Pellepoix también la observa y comenta lo siguiente : 'es una nebulosa aburrida, pero perfectamente delineada; tan grande como Júpiter y parece un planeta que se desvanece'. Posiblemente, la comparación de Darquier, popularizada por Messier, con un planeta, puede haber influido en el astrónomo William Herschel, quien encontró que los objetos de este tipo se asemejaban al planeta recién descubierto por él, o Urano, e introdujo el nombre de : 'nebulosas planetarias'. William Herschel describió a M57 como 'una nebulosa perforada o anillo de estrellas'. Herschel también identificó algunas de las estrellas superpuestas y supuso correctamente que 'ninguna de ellas parece pertenecer a ella' ".
Comentarios
Publicar un comentario